sábado, 30 de agosto de 2014

Desintoxicate de todo lo toxico que hay en tu alma .



Hebreos 12:1b: despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante. ( NVI)

Las toxinas son proteínas o lipo polisacáridos que afectan el organismo que las asimila, todos los alimentos las contienen, pero se incrementan notablemente cuando se utiliza alguna fuente de calor para su preparación, aunque tu cuerpo también las puede asimilar de otras fuentes como, el aire contaminado, en los medicamentos, en los objetos que tocas a diario, la radiación solar e inclusive tú mismo cuerpo las puede desarrollar si tu estado emocional está afectado por el estrés.
Para que el cuerpo esté funcionando en perfecto estado es necesario la desintoxicación.
La desintoxicación es el proceso de remover sustancias tóxicas del cuerpo.
De la misma manera espiritualmente y emocionalmente llegan a nuestras vidas muchas toxinas por muchas vías y se hace necesario que también nos realicemos una desintoxicación espiritual.
La Desintoxicación espiritual remueve las toxinas que nos atacan a diario, entre ellas las influencias venenosas, las emociones venenosas y las formas de conducta venenosas.
He aquí algunos consejos para desintoxicación del alma.
1-Sumergete en la presencia de Dios: Entra en intimidad con Dios a través de la oración y permite que el Espíritu Santo trabaja en ti, redarguyéndote de pecado y al hacerlo, trae todo lo que te atormenta o te aflige ante Dios.
2- Perdona: A través del perdón, tú te libera y liberas a otros, permite que las cicatrices de tu vida sean sanadas pero es necesario perdonar.
3- Renueva Tu mente : Somos los que pensamos y para actúan correctamente nuestros pensamientos deben ser los correctos para ello , necesitamos pensar como pensaría Cristo y a través del ejercicio de meditación , lectura y estudio de la Palabra y sobre todo con la ayuda del Espíritu Santo podemos tener siempre una mente renovada , orientada a agradar a Dios .

Dios desea que vivas una vida abundante en Cristo pero no puedes convivir al mismo tiempo con el pecado o la desobediencia ya que esto es toxina para tu alma y estorbo en tu comunión con Dios.

Decídete cada día por la vida victoriosa y de éxito que Dios desea para ti.

                         www.elrehmadehoy.blogspot.com

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